La denuncia presentada por nuestro organismo se basa en una serie de denuncias realizadas por el CIPAE en 1976 sobre la desaparición de 8 menores que eran hermanos luego del secuestro y desaparición de sus padres. En 1977 se los habría localizado y a pesar de poseer esta información la mediática “Comisión de Verdad y Justicia” decidió omitirla en su Informe Final de la Dictadura. Con ellos suman 12 los jóvenes localizados y restituidos.
Se trata del caso de los Hermanos López López, hijos de Madrona López y Elixto López Maidana, ambos secuestrados durante la denominada “Pascua Dolorosa” en 1976. Madrona fue liberada en 1977 mientras que Elixto, el padre de los niños, aún permanece desaparecido. La Comisión de Verdad y Justicia documentó la denuncia sobre la Desaparición Forzada de Elixto López Maidana – como la de sus 3 hermanos – pero nada nunca dijo sobre lo ocurrido con los hijos del dirigente campesino.
LOS PADRES
Elixto, era el segundo de 4 hermanos, y junto a Madrona provenían de familias campesinas. Ambas familias oriundas de Santa Rosa, Departamento de Misiones. Elixto junto a sus hermanos; Policarpo, Francisco y Adolfo, militaba en el Movimiento Campesino Paraguayo (MCP) y en la Organización Político Militar (OPM). Madrona no desarrollaba ningún tipo de militancia política, sin embargo también provenía de una familia que junto a la de Elixto participaron durante años de las Ligas Agrarias Cristianas. A Elixto lo llamaban “Fifa”.
Elixto y Madrona tuvieron 9 hijos; su primogénito de nombre Eleno quien también fue perseguido, se hallaba cumpliendo con el Servicio Militar Obligatorio al momento del secuestro de su familia; mientras que el resto de los hijos del matrimonio – todos menores de edad – fueron secuestrados junto a su madre de su hogar de Compañía Fátima, Departamento de Itapúa. Previamente había sido secuestrado Elixto junto al resto de sus hermanos.
LOS SECUESTROS
El 14 de Mayo de 1976 los hermanos Elixto, Francisco, Adolfo y Policarpo López Maidana fueron secuestrados en la ribera del Rió Paraná en el Departamento de Itapúa, luego de haberse fugado del intento de secuestro ocurrido unos días antes en los alrededores de la Compañía Fátima – lugar donde todos residían – motivo por el cual debieron refugiarse en la Colonia Arroyo Frazada que poco antes de irse había sido tomada por fuerzas conjuntas de seguridad coordinadas por el ex -represor Camilo Almada Morel. Este y otros hechos son los que luego recibieron el nombre de “Pascua Dolorosa”.
Casi en paralelo el domicilio de Elixto y Madrona fue violentamente allanado. En su interior se hallaba Madrona y 8 de sus 9 hijos. La madre de los niños fue trasladada inmediatamente a la “Delegación de Gobierno de Itapúa”, mientras que los niños quedaron en el hogar con custodia militar. Luego de unas horas, y por disposición del entonces Delegado de Gobierno; Francisco Bogado, los niños fueron entregados a familias de vecinos del distrito, quienes eran allegados al funcionario del gobierno de la dictadura. Francisco Bogado, en su carácter de funcionario, y mediante un documento desclasificado aseguraría después ante los reclamos por parte de la familia de los niños; “que los menores habían quedado en desamparo por parte de sus padres” y “que habían sido abandonados”.
Lejos de esa realidad, Madrona, padecía todo tipo de tormentos en los 5 Centros Clandestinos de Detención, Tortura y Exterminio donde permaneció detenida. 2 de esos lugares del horror estaban bajo jurisdicción del mismo funcionario de gobierno: Francisco Bogado.
Mientras tanto Elixto, el padre de las criaturas, agonizaba junto a sus 3 hermanos en el Centro Clandestino de Detención, Tortura y Exterminio de “Abraham Cué”, luego de haber padecido numerosos tormentos en la “Delegación de Gobierno de Itapúa” y la “Delegación de Gobierno de Misiones”. Hay una versión de que los 4 hermanos habrían sido trasladados en avión desde Itapúa – previo a ser llevados a Misiones – al “Departamento de Investigaciones Policía Nacional” de La Capital, pero esa versión nunca pudo confirmarse. Sobre su último destino según el testimonio de los sobrevivientes Francisco Rolón, Pedro Martínez, entre otros; puede saberse que los cuerpos de los hermanos habrían sido enterrados en inmediaciones de los alrededores de “Abraham Cué” sin llegarse a precisar el lugar físico determinado. Elixto, Adolfo, Francisco y Policarpo López Maidana, hasta la fecha, continúan desaparecidos.
EL DESTINO DE MADRONA Y LOS NIÑOS
Madrona fue trasladada en 1976 al Centro Clandestino de Detención, Tortura y Exterminio “Emboscada”. Desde ese lugar de encierro, tortura y exterminio; Madrona escribió numerosas cartas al Comité de Iglesias Para Ayudas de Emergencias (CIPAE), a la Prensa Nacional y a la Cruz Roja Internacional para pedir que se busque a sus niños y se los restituya a su familia. En base a eso el CIPAE – como incluso esta publicado en la obra de Alfredo Boccia Paz “Es mi Informe” – emprendió la búsqueda de los niños que fueron entregados a cómplices civiles de la dictadura. De tal forma para Agosto de 1977 – y tal como pudo saber nuestro organismo a través de los oficios presentados – el Comité de Iglesias pudo localizar a 7 de esos niños. Pudo localizar a Braulio – de 15 años – a los mellizos de 13 años; Narciso y Narcisa. A Sabina de 10 años, a Timotea de 7, y a Rosa de tan solo 4 años. Pero lo que más preocupaba a la familia eran los más niños: Miguela de 1 año y Teófilo de tan solo 6 meses al momento de su desaparición.
Cuando el CIPAE pudo localizar a Miguela, encontró el rastro de Teófilo.
Había sido entregado a la misma familia pero está al no querer hacerse cargo de 2 bebés entrego al niño a una familia amiga de la cual el CIPAE – por insistencia y perseverancia – estaba convencido de que también podría ser localizado.
Madrona fue liberada en 1977 y pudo reencontrarse con 7 de sus niños. También pudo reencontrarse con Eleno, su hijo mayor quien estaba realizando la conscripción cuando fue secuestrada. De esta forma 7 de los hijos de Madrona y Elixto López fueron recuperados. El Estado Paraguayo, incluso a través de su “Comisión de Verdad y Justicia” y de su “Dirección Nacional de Verdad y Justicia”, nunca investigo el caso de estos Niños Desaparecidos, a pesar de que era de público conocimiento que uno de los menores todavía permanece desaparecido. El Estado se rehusó ha reconocer estas Violaciones a los Derechos Humanos, las omitió de su Informe Final, y las negó cuando se solicito información sobre los casos de Niños Desaparecidos de los cuales había registro en sus archivos.
El hecho en sí de que el Estado Paraguayo halla “omitido” la denuncia sobre los Niños Desaparecidos es repudiable. H.I.J.O.S. Paraguay eleva la pregunta de PORQUE, aún desde sectores oficiales de “derechos humanos”, tales acciones y conductas. Es ese Aparato Represivo No Desmantelado, es el Partido Colorado, y son los traidores en sintonía con los mismos de ayer, los que desde el lugar de gobierno SIEMPRE decidieron imponer el Olvido, el Silencio y cuando no; una historia a medias, que NO es la VERDADERA.
El 7 de Diciembre de 1992 el Diario ABC Color publicaba una nota sobre Madrona y su incansable búsqueda por sus hijos, y por Teófilo ese niño que aún permanece desaparecido.
El año pasado H.I.J.O.S. Paraguay labro un oficio extraordinario a la Dirección Nacional de Verdad y Justicia para que entregara toda la información sobre denuncias de Niños Desaparecidos. Oficio que nunca respondió. Fue ese mismo año, que la misma Dirección Nacional de Verdad y Justicia, contra todo protocolo judicial tomo una declaración improvisada a una mujer de nombre Victorina Godoy Vera que aseguraba ser Victorina Godoy Viera, caso de Desaparición Forzada reconocido por Uruguay e incluso también por Paraguay, en el marco de acciones conjuntas previas al Operativo Cóndor.
El caso de la Desaparición Forzada de Victorina Godoy Viera fue expuesto, presentado y reconocido incluso por el MERCOSUR y por las Naciones Unidas. La aparición de esta mujer que afirmo “que nunca fue torturada, que siempre fue tratada muy bien, que nunca fue violada y que estaba embarazada pero que perdió ese bebé” fue la estrategia política para impedir que en Argentina se desarrollara la acción judicial correspondiente ante el caso de restitución de Victoria Godoy, hija recuperada cuya restitución se plasma en la decena de documentos desclasificados sobre su nacimiento; despojo y entrega a manos ajenas a la de su madre así como sobre los testimonios de numerosas sobrevivientes que vieron a Victorina e incluso una de ellas presenciare el nacimiento de su hija entre el 8 y el 9 de Marzo de 1974.
Finalmente decir que en basé a la Desaparición Forzada de los 8 niños y hermanos López López, se halla en los “Archivos del Terror” el documento citado por Alfredo Boccia Paz en su obra “Es mi Informe” (Página 207), también citado en artículos de ABC Color y Última Hora, que deja en claro el mecanismo de registro de la entrega de los menores desaparecidos por parte de las Fuerzas Armadas Paraguayas.
El documento se trata de un informe de Francisco Bogado al entonces Ministro del Interior Sabino Augusto Montanaro en el que se afirmaba que:
“… los citados menores al quedar en desamparo por parte de sus padres, fueron recogidos por vecinos de la jurisdicción, cuyos paraderos son: Braulio de 15 años, se encuentra en poder del Sr. Erasmo Aquino, con domicilio en el pueblo de San Pedro del Paraná; Narciso y Narcisa López, de 13 años, mellizos; Miguela López de un año y un menor Teófilo López López, cuyo nombre no figura en el Oficio, se hallan depositados en la casa del Sr. Custodio Ávalos, en la Compañía Santo Domingo, del distrito de San Pedro del Paraná; Sabina de 10 años se halla en poder de una hermana del Sr. Custodio Ávalos; Timotea López de siete años, se encuentra en poder del Sr. Cleto Carísimo (h) y Rosa López López de cuatro años, depositada en la casa del Sr. Fermín Riveros, ambos domiciliados en el pueblo de San Pedro del Paraná (…)”
Madrona nunca bajo los brazos y a pesar de que esta historia halla sido silenciada durante décadas de años, sale a luz. La memoria vence al olvido. En estos momentos políticos del pueblo paraguayo, es necesario, tener memoria absoluta de todo lo ocurrido para que cada uno de esos hechos no vuelva a repetirse.
Cabe aclarar que nuestro organismo respetara en todo momento el deseo y voluntad de las familias en cuanto a las instancias judiciales correspondientes sobre el caso.
Con ellos suman 12 los Niños Desaparecidos, hoy jóvenes, localizados y restituidos por sus legítimas familias.
Solo esperar que algún día Teófilo aparezca y regrese a los brazos de su madre. Su familia, H.I.J.O.S., y entre todos te estamos buscando.
No Olvidamos. No Perdonamos. No nos Reconciliamos.
Hijos por la Identidad y la Justicia contra el Olvido y el Silencio
(H.I.J.O.S.) – PARAGUAY